Mercè Rodoreda

Mercè Rodoreda i Gurguí vino al mundo el 10 de octubre de 1908 en Sant Gervasi de Cassoles, Barcelona. Fue hija única de Andreu Rodoreda y de Montserrat Gurguí, y frecuentó la escuela desde los siete a los diez años -la primaria y luego el colegio Nuestra Señora de Lourdes que tendría que dejar al padecer su abuelo un ataque de apoplejía ya que su madre quería que la ayudase a cuidarle-, y como eran otros tiempos, le enseñaron costura y a cocinar, educación apropiada para una jovencita de su edad cuyo sólo horizonte debía ser el matrimonio y unos hijos de quienes ocuparse, predestinación ésta para la que no había nacido la futura escritora, a la que le gustaba mucho leer y experimentaba una gran curiosidad por la vida y sus enseñanzas, y a medida que fue creciendo desarrolló también un sentido de la libertad y del individualismo que la convirtieron en una mujer avanzada a su tiempo. Hay que destacar que la figura del abuelo fue importante en su vida ya que se profesaban un gran cariño y que la muerte de éste constituyó el primer gran trauma afectivo en la vida de Mercè.

En 1928 conoce a su tío materno, que le lleva diez y siete años, Joan Gurguí, recién llegado de Buenos Aires a donde marchase muy joven para hacer fortuna, y con el que acabará contrayendo matrimonio bajo dispensa eclesiástica por la consanguinidad; al respecto de esta unión parece ser que Mercè Rodoreda fue violada antes de la boda por el que luego sería su marido ya que se supone que la violación que se describe en su novela Aloma es autobiográfica; de ser cierto este hecho podría explicarse entonces su posterior conducta y desarraigo familiar. Al año siguiente, el 23 de julio de 1929, nace su único hijo Jordi. En este año ella conoce a Andreu Nin y se supone que tuvo una breve relación sentimental con él.

El matrimonio, como es lógico, no fue lo que se dice un éxito ya que Mercè no se sentía a gusto en el papel de esposa y madre, por ello se dedicó a diversas actividades intelectuales deseando emanciparse económicamente de Joan Gurguí, periodismo entre ellas, y a escribir su primera obra Soc una dona honrada?, que le fue publicada en editorial Catalonia con financiación de su marido.

Su famosa novela Aloma, que fue Premi Creixells, se publica el año 1938. En plena Guerra Civil fallece su padre a consecuencia de un bombardeo, y en 1939, concretamente el 23 de enero, abandona a su marido y a su hijo, iniciando un exilio que durará muchos años.

Este auto exilio no surgió de la noche a la mañana de forma irreflexiva; ella trabajaba en el Institut de les Lletres Catalanes a las órdenes de Joan Oliver, Pere Quart, y cuando, en 1939 se acaba la guerra, con la marcha de muchos intelectuales catalanes, Mercè decide irse también.

El amor entra en su vida, no vamos a decir de nuevo, sino de verdad, en la figura de Armand Obiols, seudónimo de Joan Prats, del grupo de intelectuales de Sabadell, a quien conoce en el castillo de Roissy-en-Brie, y aunque está casado y es padre de una niña, se convierten en amantes y después de muchas idas y venidas por Francia, motivadas por la precariedad económica y el momento político que se vive, Obiols marcha a Burdeos y ella se queda en Limoges y en 1943 se reúne con él.

 

En 1949 vuelve a Barcelona haciendo un alto en su exilio.

Esta época de amor, guerra y posguerra no es muy prolífica en lo literario; ella trabaja haciendo traducciones, aunque también cose si se da la circunstancia, y finalmente reanuda la escritura, que cristalizará cinco años más tarde con la novela Jardí vora el mar a la que seguirán su celebérrima La plaça del diamant –que será publicada en 1962-, y después Mirall trencat; por aquella fechas empieza a escribir La mort i la primavera.

(Una curiosa anécdota digna de mención es que La plaça del diamant fue presentada por su autora el año 1960 al Premi Sant Jordi, y Josep Pla que era miembro del jurado la rechazó porque el título bajo el cual la presentaba Colometa, le pareció cursi).

Ese mismo año 1960 entra en contacto laboralmente con el editor Joan Sales, con quien luego publicará sus novelas.

En 1962 se publica La plaça del diamant convirtiéndose en un éxito desde el principio –posteriormente llevada al cine con la actriz Silvia Munt en el papel de protagonista-, y la escritora reincide enviando al Sant Jordi su novela La mort i la primavera que tampoco es premiada.

Hay que decir que esta dedicación más intensa a la escritura se deberá a que Armand Obiols había encontrado un buen trabajo de traductor en la UNESCO, y con ello concluyeron las estrecheces económicas.

Armand Obiols fue para Mercè Rodoreda, su compañero, su crítico, asesor literario, y su consejero, cuyas indicaciones ella escuchaba aunque no todas las siguiera, y a él se debe que Mercè volviese a rescribir Aloma años más tarde.

Por razones de trabajo, Mercè vivió en Ginebra , con entradas y salidas, desde 1953 hasta los años 80, y en 1954 asistió a la boda de su hijo.

En 1958 es galardonada con el Premi Víctor Cátalà por Vint-i-dos contes.

Y un año después Armand inicia otra relación sentimental paralela en Ginebra, que durará hasta el final de su vida, pero no por ello rompe con Mercè Rodoreda.

En 1966 se publica El carrer de les Camelies.

En 1964 fallece su madre, en 1966 su marido, y en 1968 se encuentra por última vez con su hijo ya que a éste se la declarado una enfermedad mental y es recluido en el psiquiátrico.

En 1969 le es otorgado el Premi Ramon llull por El carrer de les Camelies.

Armand Obiols, el amor de su vida, muere en 1971 en Viena en el Hospital de la Universidad, y ella que vive a caballo entre Ginebra y Barcelona, acaba dejándose seducir por el encanto de Romanyá de la Selva, en Girona, donde concluirá estableciéndose.

Mirall trencat acaba publicándose en 1974 y Semblava de seda i altres contes en 1978. En 1980 obtiene el Premi d’honor de les Lletres Catalanes y se publica Quanta, quanta guerra, siendo su novela póstuma, e inacabada, La mort i la primavera.

Al regresar a Catalunya, reanudó su relación con sus cuatro nietos, de los que actualmente sólo queda uno ya que los demás fallecieron en dramáticas circunstancias.

El 13 de abril de 1983 muere de cáncer en la clínica privada Muñoz en Girona y el día 15 recibe sepultura en el cementerio de Romanyà de la Selva.

Esta gran escritora y desgraciada mujer, ha sido traducida  internacionalmente y es una de las autoras más universales de Catalunya con una obra considerable y variada ya que en ella hay poesía, teatro, novelas y relatos.

 


© 2005 Estrella Cardona Gamio

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